Retrato en fondo cian
1,620.00 $
Pintura: Acrílico sobre tela
Creación original: 2024
Estilo: Abstracto
Original: Obra de arte única en su tipo
Tamaño: 20 an. X 30 al. cm
Marco: Sin marco
Embalaje: Enrollada en tubo
Retrato en fondo cian de Enrique Pichardo: Un estallido de color y emoción
El universo expresivo en Retrato en fondo cian de Enrique Pichardo
Retrato en fondo cian de Enrique Pichardo es una obra donde el color y la emoción convergen en un diálogo vibrante. Este artista mexicano, destacado en el expresionismo contemporáneo, rescata la esencia de su infancia para plasmar trazos llenos de vitalidad. Su arte, influenciado por personajes primitivos y la magia de lo cotidiano, se convierte en una manifestación dinámica. Así, tradición e innovación se encuentran en perfecta armonía.
El poder de la figura y el color en un retrato singular
Esta pintura en acrílico sobre lienzo, con dimensiones de 20×30 cm, presenta un rostro que remite a la artesanía mexicana. Evoca máscaras tradicionales y la profundidad de una cultura ancestral. Además, la combinación de tonos azules, blancos, negros y amarillos aporta un efecto visual vibrante. Esto genera sensaciones de calidez y energía. Pichardo, con su característico enfoque expresionista, dota a la composición de líneas naturales y estructuras audaces. De este modo, transmite un mensaje de libertad y entusiasmo.
Un artista con una visión global
El lenguaje pictórico de Pichardo se nutre del expresionismo abstracto de Willem de Kooning y Arshile Gorky. Asimismo, de Mark Rothko retoma la exploración cromática para generar un impacto emocional profundo. Su talento lo ha llevado a exponer en museos emblemáticos como Bellas Artes y el Museo de Arte Popular en la Ciudad de México. Además, ha logrado consolidarse en la escena internacional con exhibiciones digitales y colecciones privadas alrededor del mundo.
Tradición y modernidad en perfecta armonía
En esta obra, el artista presenta un expresionismo figurativo cargado de alegría y dinamismo. Aquí, la disposición de colores planos y estructuras originales establece un diálogo con el lienzo. A través de una perspectiva desinhibida y lúdica, Pichardo logra capturar la esencia de la infancia. Así, transforma la espontaneidad en un lenguaje visual que trasciende fronteras.