Retrato en fondo malva

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Pintura: Acrílico sobre tela
Creación original: 2024
Estilo: Abstracto
Original: Obra de arte única en su tipo
Tamaño: 20 an. X 30 al. cm
Marco: Sin marco
Embalaje: Enrollada en tubo

Retrato en fondo malva de Enrique Pichardo: Celebración del color y la identidad

La esencia vibrante de Retrato en fondo malva de Enrique Pichardo

Retrato en fondo malva de Enrique Pichardo es una explosión de color y simbolismo. El artista, representante del Expresionismo Contemporáneo mexicano, canaliza su creatividad infantil en cada trazo. Su obra, marcada por la espontaneidad y la intensidad emocional, se convierte en un canto a la vida. Para Pichardo, pintar es una experiencia total que involucra cuerpo, mente y alma, transmitiendo una energía vibrante y casi musical.

Fusión de tradición y expresividad en un retrato singular

Esta pintura en acrílico sobre lienzo, de 20×30 cm, presenta un rostro que evoca la riqueza cultural de México. En ella, Pichardo fusiona los patrones dinámicos de los alebrijes con estructuras audaces y colores vibrantes. Los tonos malva, blanco, negro, azul y amarillo generan una composición llena de energía y vitalidad. Con su característico expresionismo figurativo, el artista logra un diálogo entre tradición y modernidad. Así, su obra transmite un mensaje de entusiasmo, libertad y poder.

Una trayectoria marcada por la exploración y el reconocimiento

Enrique Pichardo Egea se formó en la reconocida Escuela Nacional de Pintura, Escultura y Grabado “La Esmeralda”, donde absorbió la esencia del arte mexicano. Su trabajo ha sido exhibido en galerías de Estados Unidos, España, Singapur, Austria y Bélgica. Gracias a esta proyección internacional, su obra ha alcanzado una amplia audiencia. Además, sus influencias van desde el arte bruto de Dubuffet hasta la energía urbana de Basquiat, incorporando elementos visuales y literarios en un estilo propio.

Retrato en fondo malva de Enrique Pichardo: Un juego de color, identidad y emoción

Con una perspectiva desinhibida y lúdica, Pichardo transforma cada lienzo en un espacio de celebración. En esta obra, la disposición de llanuras planas de color y la intensidad del trazo reflejan una visión vibrante de la existencia. Su pintura no solo dialoga con la tradición mexicana, sino que también invita al espectador a sumergirse en un universo de alegría y expresión pura.